Médicos de Pakistán están en huelga de hambre por falta de protección frente a coronavirus
Responsables de los servicios de salud de Punyab dicen que los hospitales han recibido una cantidad suficiente de equipos de protección pese a «un retraso inicial». «Necesitamos trajes de protección, no homenajes», denunció una enfermera.
Decenas de médicos y personal sanitario en Pakistán iniciaron una huelga de hambre hace 10 días en Lahore (este) para protestar contra la falta de material de protección frente al nuevo coronavirus, informaron el sábado.
«No tenemos la intención de parar (la huelga) hasta que el gobierno nos escuche«, dijo a la AFP el doctor Salman Hasib, en huelga de hambre desde el 16 de abril.
«Somos la primera línea frente al virus y si no estamos protegidos toda la población corre peligro», recalcó este dirigente del sindicato médico Gran alianza por la salud, organizador de esta protesta.
Según esta entidad, unas 30 personas llevan a cabo esta huelga de hambre en los locales de la dirección de salud de la provincia del Punyab, cuya capital es Lahore, y unos 200 manifestantes se turnan para apoyarles.
«Necesitamos trajes de protección, no homenajes», denunció por su parte una enfermera que no quiso dar su nombre. «Algunos hemos tenido que comprarlos nosotros mismos», agregó.
Responsables de los servicios de salud de Punyab afirmaron a la AFP que los hospitales han recibido una cantidad suficiente de equipos de protección pese a «un retraso inicial».
En Punyab, la región más poblada del país, viven 100 millones de personas. Hasta ahora se han registrado 5.000 enfermos de los casi 12.000 de todo el país. Según otro sindicato médico, en la provincia hay 150 trabajadores del sector sanitario que están infectados.
Pakistán, cuyo sistema de salud es muy precario, ha registrado hasta el momento 253 muertos por coronavirus.
A principios de abril, médicos que protestaban por la falta de material en el suroeste del país, fueron detenidos durante varias horas.
«Los burócratas nos vienen a ver con mascarillas de alta protección y nosotros no las tenemos», resumió Faruk Sahil, médico en un hospital público de Lahore.