Mesa dice que Áñez compartirá responsabilidades con Evo en las consecuencias de la pandemia
Recordó que la presidenta había anunciado que convocaría a los jefes políticos para asumir una estrategia conjunta pero nunca lo hizo. Dice que todo esto es también responsabilidad de Morales, por su penosa gestión en salud.
El candidato a la presidencia por Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, atacó a sus dos principales rivales políticos con el tema del coronavirus. Aseguró que la presidenta Jeanine Áñez no convocó a las otras fuerzas políticas para enfrentar el coronavirus y decidió hacerlo sola, por lo que deberá compartir la responsabilidad de lo que suceda con los 14 años «desastrosos en corrupción y gestión de salud» protagonizados por el expresidente Evo Morales.
Al expresidente, en una entrevista con Erbol, advirtió que le preocupa la gente que lleva sustento a su hogar con lo que trabaja en el día a día. «Hay un compromiso y ojalá que el Gobierno cumpla con las raciones o canastas para la población más desfavorecida, para enfrentar adecuadamente esta cuarentena».
En Italia ya se presentaron saqueos a raíz de la desesperación de la gente. «Me parece que ese es el gran problema que tenemos que enfrentar, y sobre todo, que tienen que enfrentar las autoridades. Una realidad objetiva es que hay sectores enormes de la población en condición de pobreza, a los que es difícil aislarlos completamente, porque seis y siete personas comparten uno o dos ambientes».
El otro desafío es, repite Mesa, «el comer día a día. En una economía que tiene un 70 % de informalidad es imposible cumplir la cuarentena si no hay un soporte de provisión y eso implica una movilización masiva de Fuerzas Armadas, Policía o voluntarios que lleven adelante la distribución ordenada de esos sectores vulnerables».
Aseguró que no es fácil responder a todo esto y recalcó que «el Gobierno ha tomado la decisión de establecer de manera directa las acciones, sin la colaboración de otros sectores» y que espera que el resultado sea el adecuado. Subrayó que el ejecutivo decidió, porque la Presidenta había señalado que iba a convocar a los jefes políticos, a diferentes sectores para establecer una estrategia común, tanto política, como luego vinculada al tema de la salud, llevar adelante de manera personal su respuesta a la epidemia«, y estableció que será una decisión que deberá asumir en su totalidad.
En cuanto a su posición con respecto a la forma en la que maneja la emergencia, manifestó que sería mejor que el Ejecutivo asumiera una posición más comunicativa antes que coercitiva. «Estamos en un estado de excepción aunque no se llame así, estamos en cuarentena con una serie de limitaciones que son adecuadas. Pero las sanciones, las amenazas, las ideas de represión no nos parece el camino, pese a que hay que ejercer sanción contra una persona que no cumple, pero debe ser proporcional y el concepto debe ser de persuasión, comunicación y de información, más que de represión».
«El endurecimiento de la cuarentena es una decisión correcta», dijo, aunque criticó que se retrasaron en tomar decisiones. «Hasta el 9 de marzo no se tomaban las medidas correctas y al día siguiente se produjeron los primeros contagios».
También lamentó que el Gobierno se hubiera retrasado en la habilitación de los laboratorios. «Nosotros planteamos que debían haber varios para la toma de pruebas y esto se habilitó hace apenas dos o tres días. Primero sólo había en Santa Cruz, luego en La Paz y finalmente salió la autorización para todos».
Además se preguntó si es que el Ejecutivo está tomando las muestras necesarias en los casos sospechosos. «¿Tenemos el número suficiente de reactivos y mecanismos que permitan a todos los laboratorios tomar las muestras adecuadas? El concepto fundamental es que el muestreo es clave, saber cuál es la dimensión de la enfermedad».
El gobierno de transición debía entregar el mando en agosto, pero ahora, en el mejor de los casos, será en noviembre. Mesa consideró que por una economía mundial que se está cerrando en Estados Unidos y está clausurada en Europa, «esto definirá un panorama económico muy complicado para el actual gobierno y obviamente de mucho más gravedad para el que se instaure después de la elección. Si es que llegamos, no lo tendremos para nada fácil. Al escenario que dejó Evo Morales con el fraude, se suma ahora esta crisis de salud«.
Por último recordó que Bolivia vivió 14 años de un gobierno presidido por Morales. «El más largo en la historia del país. De ese tiempo, ocho años fueron de una extraordinaria bonanza económica, el mejor momento de los precios internacionales de las materias primas en la historia. El resultado de ese gobierno en lo que le toca a la salud fue desastroso, un sistema universal de salud que no funciona, con hospitales de segundo y tercer nivel absolutamente insuficientes, con unidades de terapia intensiva que no alcanzan para cubrir en condiciones normales, menos ahora. No tenemos equipo, infraestructura, ni las condiciones mínimas para encarar un desafío de esta naturaleza«.
Concluyó que en 14 años de «corrupción, de satélites, de edificios de Palacio de Gobierno, con casos como el del Fondo Indígena y las barcazas chinas» llevan a la conclusión de que lo que enfrenta Bolivia con el coronavisus «no es de exclusiva responsabilidad del gobierno de Jeanine Áñez, sino de los 14 años de Gobierno del MAS«.