Hombre buscado por la policia por llevar con engaños a su casa a dos niños e intentó abusar tendría antecedentps penales
La Policía busca al hombre que se dio a la fuga luego de flagelar e intentar abusar de un niño de 10 años, y de encerrar a una niña de 8 años en una habitación, luego de llevarlos con engaños a su casa. El agresor fue identificado como Marco Antonio Olguín Justiniano, de 29 años, quien se encuentra prófugo.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), coronel Edson Claure, indicó que se activaron los mecanismos de búsqueda para dar con el sujeto que agredió a un menor de edad.
«Esta persona identificada como Marco Antonio Olguín tendría antecedentes penales. Se han emitido las órdenes para que la Felcc y otras unidades lo ubiquen y detengan», indicó Claure.
Además de los agentes de la Policía, funcionarios de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia visitaron el barrio Plan 4.000 a fin de colectar mayores datos de lo sucedido.
Un vecino dijo la Policía haber escuchado los gritos y que al aproximarse al lote baldío vio a un hombre agrediendo a un niño al que acusaba de haberse apoderado de su celular. Cuando el vecino amenaza con llamar a la Policía, el agresor del pequeño se da a la fuga.
El niño, una vez liberado de su agresor, pidió ayuda para rescatar a otra niña de ocho años (que sería su familiar), que estaba encerrada en la casa del brutal sujeto.
Sin embargo, no llegaron a las 19:00 o 20:00, como solían hacerlo. «El hombre es un extraño, no lo conozco, él se llevó a los niños con engaños, diciéndoles que les iba a pagar 100 bolivianos si le lavaban la ropa. Los hizo trabajar y no les pagó y además los agredió», reclamó la madre.
Agrega que afortunadamente el niño no fue abusado, pero sí sufrió cortaduras en su rostro, brazo y en su abdomen.
«Mi niño está estable, gracias a Dios, quiero que busquen a ese hombre porque puede cometer lo mismo con otros niños», dijo aliviada la mujer.
Los vecinos del Plan 4.000 se mantendrán en vigilia y además denunciaron que una vez conocido el hecho, allegados al agresor que hoy es buscado, se llevaron a un familiar (madre o abuela) que vivía con él.