JOVEN DE 20 AÑOS FUE DESCUARTIZADA POR UN POLICÍA, LA VÍCTIMA FUE ENCONTRADA EN UN CONTENEDOR DE BASURA.
La madre de Sheyla Cóndor reveló que su hija habría sido enterrada sin órganos vitales, como el corazón y un riñón. «¿Dónde están esos órganos? Los policías deben cuidarnos, no hacernos daño. Aún no acepto la forma en que mi hija murió», expresó entre lágrimas.
Blanca Reyna Lara, una joven de 20 años originaria de Virú, La Libertad, desapareció el pasado 19 de octubre de 2024 tras viajar a Lima con la intención de trabajar y alojarse en casa de un familiar. Cuatro días después, el 22 de octubre, una recicladora encontró partes de su cuerpo calcinadas en un contenedor de basura en Huachipa, distrito de Lurigancho-Chosica. El hallazgo puso en marcha una investigación que hasta el momento no ha podido encontrar responsables.
Tras el hallazgo, peritos de antropología forense de la Morgue de Lima acudieron al lugar para recopilar pruebas y analizar los restos. Entre las extremidades calcinadas, encontraron un detalle crucial: un tatuaje de Lisa Simpson en el antebrazo derecho de la víctima. Este identificador fue comparado con imágenes publicadas en redes sociales, donde Blanca solía compartir momentos de su vida y mostraba el diseño. La coincidencia permitió confirmar su identidad.
El caso fue catalogado como unfeminicidiodebido a la extrema violencia evidenciada en el estado de los restos. Sin embargo, las demás partes del cuerpo aún no han sido localizadas, lo que dificulta el avance de las investigaciones.
Desaparición de la joven y denuncia
Según las declaraciones de la familia, Blanca salió de su natal Virú el 19 de octubre con destino a Lima. Tenía previsto llegar a la casa de un familiar y comenzar a trabajar. Sin embargo, nunca llegó a su destino, y días después de su desaparición, un pariente recibió una llamada sospechosa de una mujer que intentó hacerse pasar por Blanca. Esta persona afirmó estar con su pareja y explicó que su teléfono se había dañado. El familiar que atendió la llamada identificó que no se trataba de Blanca y colgó de inmediato.
Tras la desaparición de Blanca, su familia presentó una denuncia que activó la búsqueda. La llamada falsa aumentó la incertidumbre sobre su paradero y generó sospechas entre los familiares. Días después, el hallazgo de las extremidades calcinadas confirmó las peores noticias.
La Policía aún intenta reconstruir el recorrido de Blanca desde su salida de La Libertad hasta el lugar donde fueron encontrados sus restos. Además, buscan determinar si los implicados actuaron de manera premeditada o si existieron complicidades en el crimen.
Familia exige justicia
Los familiares de Blanca Reyna Lara han exigido justicia desde el momento en que se confirmó su identidad. Piden celeridad en la investigación y en la identificación de los responsables. También expresaron su esperanza de que las autoridades localicen las partes faltantes del cuerpo, lo que permitirá ofrecerle una sepultura digna.
Hasta ahora, no se han producido detenciones, y las autoridades continúan trabajando en el caso. La familia, por su parte, ha señalado que el proceso judicial debe ser rápido y eficiente para evitar la impunidad. Este caso se suma a los resientes feminicidios que han conmocionado al país.