Cochabamba sigue bloqueada pese a la “pausa humanitaria”

Los sectores afines a Evo Morales decidieron este domingo declarar una “pausa humanitaria” en los bloqueos de caminos que mantenían desde hace dos semanas, con el objetivo de presionar a favor de la candidatura del expresidente para las elecciones nacionales del 17 de agosto. Sin embargo, hasta anoche persistían cuatro cortes de ruta, todos ubicados en el departamento de Cochabamba.

Gobierno conforma una comisión para investigar los hechos que terminaron con seis fallecidos

“Determinamos una pausa humanitaria en la movilización nacional en carreteras, mientras se realice una investigación internacional exhaustiva, transparente e independiente de todos los hechos provocados por la intervención policial y militar instruida por el Gobierno de Luis Arce”, señalaba su pronunciamiento.

Asimismo, indicaron que mantendrán “otras medidas de presión” hasta lograr que “renuncie” el presidente Luis Arce.

Los seguidores del exmandatario iniciaron hace dos semanas un bloqueo de carreteras del país en pos de conseguir la habilitación del exmandatario como candidato en las próximas elecciones nacionales, a lo que se suman exigencias para que el Ejecutivo resuelva la falta de dólares y combustibles.

El miércoles, tres policías fallecieron por heridas de bala mientras intentaban llegar a la localidad de Llallagua, en el norte del departamento de Potosí, donde manifestantes atacaron a pobladores que trataban de despejar las vías. Otro efectivo murió en Cochabamba tras ser retenido por los bloqueadores, quienes supuestamente activaron un explosivo en su cuerpo.

A esto se suma el deceso de un civil, presuntamente seguidor del expresidente, que manipuló mal un explosivo, y el de un adolescente que fue golpeado hasta morir acusado de ser “informante de la Policía”.

Sin embargo, Morales dijo la mañana de este domingo, durante su programa radial, que lo ocurrido en Llallagua fue algo “bien montado” por el Gobierno para culpar al movimiento campesino. También señaló que, presuntamente, en la acción militar y policial de desbloqueo en Llallagua hubo varios manifestantes muertos de los que “no se comunica nada”, aunque no dio nombres ni detalles al respecto.

En su pronunciamiento, los sectores afines al exmandatario boliviano declaran un “duelo nacional” por las muertes que consideran resultado de los enfrentamientos entre bloqueadores y fuerzas de seguridad.

Además, se pide a los organismos internacionales “la conformación inmediata de una Comisión Internacional para la investigación exhaustiva y transparente” de esos hechos en los que presuntamente ocurrieron vulneraciones a los derechos humanos, entre otros puntos.

Morales insiste en ser candidato pese a que el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) ratificó recientemente que la reelección solo está permitida “por una única vez de forma continua”, sin posibilidad de un tercer mandato, por lo que Morales no puede ser candidato al haber gobernado en tres periodos.

BLOQUEOS

Según el Mapa de Transitabilidad de la ABC, pese a la declarada “pausa humanitaria”, continuaban activos cuatro puntos de bloqueo, todos ubicados  en el departamento de Cochabamba: Puente Lágrimas en Ivirgarzama (municipio de Colomi), Puente Espíritu Santo en Villa Tunari, Cruce Vacas en el municipio de Arani y Puente Lope Mendoza en la ruta Epizana–Aiquile.

Bloqueos dejan más de 200 heridos

En los 14 días de los bloqueos encabezados por sectores afines a Evo Morales, el conflicto dejó más de 200 personas heridas y seis fallecidos entre civiles y policías. La ministra de Salud y Deportes, María Renée Castro, denunció que la violencia registrada también ha afectado al sistema de salud, con ambulancias bloqueadas, centros médicos atacados y personal amenazado.

 A causa de los bloqueos, manifestó que hubo personas heridas que no pudieron ser atendidas a tiempo debido a la violencia de algunos grupos, “que bajo el argumento de una protesta, pusieron en riesgo la vida de otros”.

“Durante los bloqueos, se registraron 203 personas heridas, entre ellas 16 profesionales de salud y 108 efectivos policiales. El resto son ciudadanos, hombres, mujeres y jóvenes. Nadie debería sufrir daños en su salud o arriesgar su vida como consecuencia de la intolerancia y el conflicto”, indicó la ministra.

“Esto no es una lucha social, esto se traduce en actos criminales”, apuntó.

Ríos apunta a Evo y parlamentarios

El ministro de Gobierno, Roberto Ríos, anunció este domingo la conformación de una comisión especial de investigación, con el objetivo de esclarecer los hechos violentos que derivaron en la muerte de cuatro efectivos policiales durante operaciones de desbloqueo ‘evista’, advirtiendo que no solo se apunta a Evo, sino también a diputados y senadores.

“No podemos perder de vista que todas estas muertes no solo se deben responsabilizar al señor Evo Morales, sino también a todos sus voceros, a esos diputados y senadores que han sido parte también activa. (…) No escatimaremos esfuerzos hasta que se haga justicia. La inmunidad parlamentaria no es eterna”, dijo. La autoridad apuntó que el Gobierno nacional actuará con firmeza y sin distinciones para identificar y sancionar a todos los responsables, tanto materiales como intelectuales.

“No se trata solo de capturar a quienes ejecutaron estos crímenes, sino también de llegar a quienes los planificaron”, dijo el ministro.

“Hemos presentado de inmediato la querella correspondiente en Oruro. No podemos permitir que estos delitos queden impunes. Desde el Comando General de la Policía se ha instruido ampliar el equipo de investigadores y se conforme una comisión especial de investigadores”, informó Ríos.

Según datos preliminares, ocho personas se encuentran actualmente con detención preventiva, y ya se identificó a un número considerable de presuntos implicados, aunque por motivos estratégicos, el Ministro evitó revelar cuántas personas son investigadas.

Evo: “Soy enemigo de los bloqueos”

El expresidente Evo Morales se desmarcó públicamente este domingo de cualquier responsabilidad directa en los bloqueos que desde fines de mayo han paralizado rutas estratégicas del país, provocando desabastecimiento, pérdidas millonarias y al menos cinco muertos en medio de enfrentamientos con las fuerzas del orden. Sin embargo, su pronunciamiento, lejos de calmar las tensiones, reaviva el debate sobre su rol en la crisis social y política que atraviesa Bolivia.

“Soy enemigo de bloqueos, cuántas veces he rechazado. Ahora todo me echan la culpa”, afirmó Morales en un acto con seguidores, intentando desvincularse de la ola de protestas protagonizadas por sectores afines al ala radical del MAS, que exigen su habilitación como candidato para las elecciones de agosto. 

Atribuyó la convocatoria a bloqueos a la dirigencia del Pacto de Unidad y alegó que “la gente nos rebasa”, aludiendo a una supuesta movilización espontánea fuera de su control.

Sin embargo, el líder cocalero no condenó las acciones que derivaron en muertos, heridos y detenciones. Por el contrario, reivindicó las marchas realizadas bajo su liderazgo en 2024, en las que se exigía atención a un pliego de 14 o 16 puntos —“no me acuerdo exactamente”, dijo— sin que el Gobierno hubiera dado respuesta.

A juicio de Morales, el crecimiento de la crisis económica y la falta de diálogo por parte del Ejecutivo son los factores que empujan a la “rebelión”.